Transformers 5: Una rafaga de diversion muy confusa.
Transformers: The Last Knight es una película desconcertante en múltiples niveles. Por un lado, la quinta entrega de la franquicia es un logro efectos especiales imponentes. El director Michael Bay, el rey de explotar cosas en Holliwood , realmente levanta su juego de acción. Disparo con cámaras IMAX 3D, la brillantez técnica de El último caballero no puede ser subestimada. Es increíble ver. La falla radica en la trama dispersa. Los elementos de las películas anteriores se mezclan en una historia actualizada, redoble de tambores por favor, desde el 1986 clásico de dibujos animados, Transformers: La película. No tiene una pizca de sentido, sino que es un giro interesante en la dirección general de la trama. Los fans de Transformers van a tener un día de campo con éste. Spoilers menores están por delante.
Optimus Prime (Peter Cullen) ha dejado mucho Tierra en una búsqueda para encontrar a su creador. En su ausencia, los transformadores continúan llegando. El Gobierno de Estados Unidos ha creado la Fuerza anti Transformers (TRF) para manejar su amenaza constante. Cade Yeager (Mark Wahlberg) ha ocultado los Autobots restantes en un depósito de chatarra Dakota del Sur. Él ha de salir a salvar robots buenos en peligro. Ellos están constantemente perseguidos por el TRF, para disgusto del Coronel Lennox (Josh Duhamel); recuerda que cuando los militares se alió con los Autobots.
La misión de rescate de Yeager a la zona de cuarentena de Chicago revela dos cosas. El primero es una huérfana valiente, Izabella (Isabella Moner), que sabe cómo reparar los robots. El otro es un amuleto antiguo de la época del rey Arturo y los caballeros de la Mesa Redonda. Transformadores eran responsables de sus victorias legendarias. Una organización secreta dirigida por Sir Edmund Burton (Anthony Hopkins) ha enterrado su influencia sobre la humanidad. El descubrimiento de los puntos amuleto para un arma oculta que anuncia una batalla apocalíptica para la supervivencia de la Tierra. Mientras tanto, en las profundidades del espacio en el mundo muerto de Cybertron, Optimus Prime ha encontrado a su creador.
La trama se balancea como un boomerang entre diferentes personajes y lugares. Es confuso como el infierno hacer el seguimiento de qué es exactamente lo que está sucediendo. Que podría conducir un tractor a través de los agujeros de la trama. Eso debería ser una crítica mordaz, pero no lo es. Me encantó la película Transformers 1986 cuando era un niño. El último caballero lleva una parte narrativa de esa película y se reutiliza. Sólo fanáticos a muerte que han visto la vieja caricatura de treinta años sabrán lo que me refiero. El último caballero es la puesta en marcha del puente a un amplio universo de los transformadores.
La película es una, aluvión acción implacable constante. Los nuevos personajes inyectar humor cuando el espectáculo comienza a desbordar. Anthony Hopkins , Jerrod Carmichael, y Cogman (Jim Carter), un androide sirviente sociópata, son hilarantes. Mantienen todo en pista cuando las explosiones y disparos en 3D empiezan a difuminar. La protagonista femenina, la actriz Laura Haddock, es fundamental; pero pasa su tiempo insinuación de comercio con Mark Wahlberg. Michael Bay continúa aludiendo el humor juvenil de doble sentido, pero eso es parte del curso la quinta vez.
Transformers: El último caballero reaviva mi interés personal en la franquicia. Incorpora temas de la película 1986, que debe cosquillas fanboys un montón. Nada de eso importa a neófitos Transformers, que serían totalmente confundido por la trama de meandros. En ese caso, dejar que el espectáculo trabajar su magia. A partir de Paramount Pictures , ver Transformers: El último caballero en el mejor cine posible. Las grandes escenas de acción, en glorioso 3D IMAX, valen la pena el precio de la entrada .
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